Los contadores como catalizadores para un crédito Pyme

Ante este panorama, la banca enfrenta el reto de diseñar y acercar soluciones financieras que respondan a las necesidades reales de las Pymes, adaptándose a sus operaciones y promoviendo una mayor inclusión financiera que impulse el desarrollo económico del país.

En este ecosistema hay un actor clave para facilitar la obtención de un crédito: los contadores, ya que su papel no sólo es ser responsable de la contabilidad, sino fungir como catalizador del acceso al crédito. En general, lo que las instituciones financieras requieren para otorgar un crédito Pyme es lo siguiente:

• Profesionalización: experiencia de los líderes en la toma de decisiones y en la operación de la empresa, una gestión compartida con varios responsables de áreas, así como un plan de sucesión operativa y directiva.
• Sana estructura financiera: generación de flujo operativo, adecuado apalancamiento y capitalización mínima.
• Uso adecuado de la deuda: tener un sano buró de crédito con un buen manejo y uso de las líneas revolventes; asimismo, se debe contar con claridad del destino del financiamiento que recibe la empresa.
• Información financiera consistente: claridad y transparencia con los estados financieros y de la declaración al Servicio de Administración Tributaria (SAT), así como de los estados de cuenta y flujos de dinero de la entidad.
• Relaciones bancarias: contar con un historial con alguna institución financiera que permita que el banco tenga conocimiento del cliente y del flujo de sus operaciones.

Como se muestra, específicamente los bancos y entidades financieras requieren información clara, estructurada y confiable para evaluar el riesgo crediticio de una empresa. Aquí es donde el contador se convierte en un actor estratégico, ya que es el encargado de organizar la información económica de la empresa, asegurar el cumplimiento fiscal e identificar necesidades de financiamiento.

El contador moderno tiene un rol de asesor financiero, lo cual implica evaluar la viabilidad de los créditos, analizar tasas de interés, plazos y condiciones.

Por otro lado, el crédito Pyme representa una herramienta financiera importante para lograr que una empresa de este tamaño se consolide y logre crecer, pues otorga los siguientes beneficios:

• Capital para crecimiento: permite la inversión en infraestructura, tecnología o innovación para su expansión comercial y de actividades.
• Mejora de liquidez: ayuda a cubrir necesidades operativas sin comprometer el flujo de efectivo.
• Fortalecimiento de la cadena productiva: facilita pagos a proveedores, mejora la relación comercial y posibilita la obtención de descuentos por pronto pago.
• Formalización y profesionalización: acceder al crédito obliga a mejorar procesos internos, lo que se traduce en fortalecimiento de la estructura empresarial.

Por otro lado, las instituciones financieras han mejorado sus ofertas para las Pymes al acompañar los créditos con servicios financieros como dispersión de nómina, terminales punto de venta, banca electrónica, descuentos en seguros de gastos médicos para la persona clave o para los colaboradores, cursos y capacitaciones, entre otros; esto permite a dichas entidades tener un mejor control administrativo y reducir gastos operativos.

En México existen cerca de 4.9 millones de empresas en este sector; no obstante, datos recientes del Banco de México (Banxico) e Inegi indican que, a principios de 2024, sólo el 16.7% de estas entidades utilizaron nuevos créditos bancarios. Este dato es relevante, ya que, como se presenta en la siguiente tabla, una Pyme con o sin crédito puede ser un factor para su consolidación y supervivencia.

La falta de capital es una de las razones principales por las que 1.4 millones de empresas cerraron entre 2019 y 2023. El crédito Pyme no sólo permite sobrevivir, sino también crecer, innovar y competir.

Lo anterior confirma que el acceso al crédito no sólo mejora la liquidez, sino que aumenta la esperanza de vida, productividad y resiliencia de las empresas en esta categoría, pues las entidades que acceden a financiamiento tienen mayor probabilidad de superar los primeros años críticos.

Ahora bien, desde el punto de vista de la banca, el contador público es un actor esencial que permite construir un puente sólido entre una institución financiera y las Pymes, ya que sus funciones brindan la certidumbre y transparencia que requiere un banco y, por otro lado, asesora y facilita la gestión de la documentación para que una empresa pueda obtener un crédito.

Conclusiones

Más allá de la contabilidad tradicional, el contador moderno tiene un rol de asesor financiero, lo cual implica evaluar la viabilidad de los créditos, analizar tasas de interés, plazos y condiciones, así como acompañar en la elaboración de planes de negocio y proyecciones financieras. Este enfoque beneficia a este sector y revaloriza el papel del contador como pieza clave en la estrategia empresarial y motor en la dinámica del sector.

En un país donde las Pymes son el pilar económico, pero enfrentan grandes desafíos para acceder a financiamiento, el contador es el engranaje que puede accionar la maquinaria. Su conocimiento técnico, su cercanía con la operación diaria y su capacidad para traducir números en decisiones estratégicas lo hacen indispensable para el desarrollo financiero de estas empresas.