Por su parte, en Europa el Corporate Sustainability Reporting Directive (CSRD, por sus siglas en inglés) ha requerido aplicar las European Sustainability Reporting Standards (ESRS). Asimismo, en México el Consejo Mexicano de Normas de Información Financiera y de Sostenibilidad (CINIF) no se ha quedado atrás y ha emitido las Normas de Información de Sostenibilidad (NIS) A-1 y B-1.
Los marcos de reporteo anteriores entregan reglas de revelación sobre las métricas de sostenibilidad de las entidades que informan; sin embargo, es importante mencionar que ninguna incluye requisitos de contabilización sobre las nuevas operaciones o transacciones que se llevan a cabo para migrar hacia la nueva era de reportar información de sostenibilidad.
Al respecto, los órganos emisores de normas contables como el Financial Accounting Standards Board (FASB) en EUA, el IASB e, incluso, el CINIF en México, se han pronunciado y, sin contradecir los marcos conceptuales actuales, siguen dejando claro que las entidades deben reconocer todas sus transacciones en los estados financieros sin entregar una guía más precisa.
Hoy, las entidades que se encuentran realizando acciones aceleradas para combatir los efectos del cambio climático van en una carrera contra el tiempo, invirtiendo mayores recursos para lograr cambios internos y externos, buscando mitigar riesgos que afecten su posición financiera actual y futura.
Por lo tanto, atendiendo el marco conceptual de las NIF e IFRS, los asuntos relacionados con el clima más comunes (pero que no se limitan), así como sus posibles impactos contables, son los siguientes:
El intercambio de equipo de producción por activos más eficientes y menos contaminantes no sólo se debe revelar en los informes de sostenibilidad, esto como parte de su estrategia de reducción de emisiones; sino que, de forma contable, debe realizarse un análisis exhaustivo de los impactos potenciales, evaluando lo siguiente:
Las entidades que hayan realizado compromisos públicos, los cuales generen una expectativa válida de recortar sus emisiones de gases de efecto invernadero (hasta que sean casi nulas) deben evaluar si algunos de estos compromisos representan una obligación constructiva, misma que implique el registro contable de un pasivo en sus estados financieros (NIF C-9 / IFRS 37, Provisiones, contingencias y compromisos).
Las entidades que adquieran certificados de energía limpia (REC, por sus siglas en inglés), o bien, créditos de carbono como parte de su estrategia cero-neto o neutralización de huella de carbono, deben evaluar la sustancia de la compra de estos instrumentos, dependiendo de si serán utilizados para los siguientes casos:
La disminución en la demanda de productos que, durante su producción, emitan una gran cantidad de gases de efecto invernadero, puede mermar las estrategias ambientales de las entidades e impactar el modelo de consumo de los clientes sobre los productos.
Conforme sea más común escuchar sobre estrategias relativas al cambio climático, estar involucrados en actividades que, potencialmente, puedan dañar el medio ambiente puede resultar en daño reputacional e impactar el valor de las marcas. Todos los ejemplos anteriores son fuentes de información externas que ayudan a evaluar si existen indicios de deterioro.
Las entidades deben evaluar si la contabilización más adecuada de dichos inventarios sigue siendo el costo, o bien, se deben contabilizar a su valor neto de realización, es decir, el precio de venta menos los costos necesarios para llevar a cabo ésta (NIF C-4 / IFRS 2, Inventarios).
Las normas contables requieren que las entidades evalúen si tienen la habilidad de continuar como negocio en marcha un año después de la fecha que se emiten los estados financieros. Los factores relacionados con el clima pueden crear una incertidumbre material relativa a eventos o condiciones que pongan en duda esta habilidad.
Si existen dudas sustanciales sobre la continuación como negocio en marcha, la administración debe revelar los juicios críticos que los llevaron a dicha conclusión en sus estados financieros (NIF A-2, Postulados Básicos / IFRS 1, Presentación de estados financieros).
La información de sostenibilidad también debe cumplir las características consideradas en el marco conceptual de las NIF, tales como el concepto de la entidad que reporta, que sea del mismo periodo, comparable, verificable, comprensible y material.
Los ejemplos anteriores reflejan que, una vez más, la profesión contable debe actualizarse y comenzar a incorporar dentro de su lenguaje nuevos conceptos de sostenibilidad. De manera proactiva, los equipos responsables de la preparación de los estados financieros deben entender los nuevos riesgos, requerimientos regulatorios, metas autoimpuestas e iniciativas para identificar, analizar y documentar el adecuado tratamiento contable que pueda afectar los resultados de las entidades rumbo a esta nueva revolución contable.
Dentro del marco normativo mexicano existe una serie de requisitos que debe cumplir quien desee ocupar los más altos cargos de fiscalización.
Gerardo González de Aragón RodríguezBajo ciertas circunstancias, hay autoridades específicas que están facultadas para solicitar información confidencial amparada por el secreto bancario.
Eréndira Berenice López GutiérrezLa formación del criterio profesional es de suma importancia en el ejercicio de la profesión contable, ya que, los servicios que se prestan son de repercusión social significativa.
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